
autor: meli_sq
pareja: nakamaru/ueda y masuda/tegoshi (un poco)
tipo: one-shot
argumento: La entomofobía lo había llevado a ese hospital... pero no todos los insectos son desagradables, o si?
nota: Inspirado en el fic de Hika "beautiful world" y dedicado a Tottsu, es el primer oneshot kattun que hago, así que probablemente este un poco raro ._.
Yuichi era un chico tranquilo, inteligente, tierno y dulce con todas las criaturas existentes en este mágico mundo… excepto claro, con los insectos. Se podría decir que lo único con lo que perdía la cordura era con esos bichitos horribles, deformes con patitas peludas, alas venosas y mil ojos.
No podía entender como su compañero de habitación, Tatsuya las admiraba tanto e incluso le llamaba loco, algo un poco irónico mientras ambos vivieran indefinidamente en un hospital para jóvenes con inestabilidad mental.
Esa mañana, Yuichi se encontraba ordenando sus pocas pertenencias en un maletín mientras Tatsuya observaba el jardín trasero a través de las barras blancas de su pequeña ventana.
“wow, hace tiempo que no usaba este suéter!” exclamó Yuichi levantando una prenda tejida de color verde “qué te parece? Te gusta?” le preguntó a su compañero.
“Con eso pareces un niño”
“Somos niños”
“Pues yo tengo 15”
“Bueno, jóvenes… da igual, me gusta mi suéter”
“Yo soy joven, tú eres un hombre viejo” bromeó Tatsuya acomodándose en su cama
“EH?! Solo te llevo cuatro años!”
“Cuando tú tenías 14, yo recién cumplí los 10, cómo te hace sentir eso, Yuichi?” bromeó
“Por qué habría de sentirme mal? tonto” preguntó “y además, desde cuándo hablas tanto? Y por qué tan interesado en mi edad?”. De repente la sonrisa de Tatsuya se quebró y un silencio momentáneo ocupó la habitación.
“Yuichi pronto será independiente…”
“Y eso qué?”
“Teniendo 20 años, Yuichi podrá salir… quiero que me lleve consigo”
“… ah? Qué dices? Porqué estás pensando en cosas tan raras? No creo que eso sea posible”
“está bien, está bien… Yuichi se ve sexy con ese suéter”
“estúpido ¬¬ halagándome no harás que nada cambie” Yuichi le lanzó una almohada tratando de que su compañero no viera su sonrojo “… mejor vamos al comedor, tengo hambre”
“Yuichi! prométeme que me llevarás contigo... oh, mira! una mariposa” dijo Tatsuya señalando la ventana
“iugh” Yuichi realmente no veía nada, pero la sola idea le causaba escalofríos.
Los dos chicos entraron en el salón comunitario minutos después, estaban haciendo fila para el almuerzo hasta que uno de sus compañeros que se encontraba adelante les pasó la voz.
“Yo! Yuichi” dijo Koki haciendo un gesto raro con las manos
“Koki, pareces un rapero, baja las manos” se rió Yuichi empujándolo levemente
“A mí también me da gusto verte hoy” se rió “y porqué Ueda no se acerca?” preguntó al darse cuenta que el otro no se había movido
“No lo sé… debe ser porque es un poco tímido, ya lo conoces” dijo Yuichi recordando que su compañero sólo hablaba con él.
“Si, quizás… sólo espero que una de sus amigas butterflies no le haya dicho que adelantarse en la fila es malo, recuerdas lo que pasó la última vez q una ‘le habló’?”
“Si, no me lo recuerdes, por favor” Yuichi se sacudió el cabello “en este lugar todos pierden la cabeza”
“sería raro que no la perdieran, estamos en un manicomio, guy”
“me dijiste GAY?!”
“No! Dije GUY! G-u-y”
“oh… hey, no estamos en un manicomio” repuso con orgullo
“llamarlo ‘hospital para jóvenes con inestabilidad mental’ es solo una formalidad para decir que andamos fregados del brain”
“del bread?!”
“No! Dije BRAIN!”
“oh… entonces recuérdame por qué estás aquí”
“otra vez? man… tienes la peor memoria de la historia”
“man?”
“No! Digo si! God no sé cómo te soporto”
“Solo bromeaba” se rió
“Te aprovechas de mi paciencia”
“No. Sólo de tu inglés”
Los chicos continuaron conversando hasta que pudieron servirse el almuerzo y se sentaron en una mesa grande para esperar a los demás.
“Umm… la carne esta buena” saboreó Koki
“Si umm…”
“Sabes…” habló Koki con la boca llena “eres un buen chico, Yuichi”
“Entonces no me escupas en la cara” respondió limpiándose con una servilleta
“En serio! Creo que eres el más cuerdo de este grupo… sólo te pones raro cuando ves insectos muy cerca de ti, ahí das miedo” dijo Koki recordando que la razón por la que Yuichi había acabado en ese hospital era porque perdió los estribos cuando la granja de hormigas de su salón se rompió en el piso y empezó a lanzarle todo para matarlas… todo y a todos.
“No hables de mi tan conchudamente, tú eres un hiperactivo”
“Mejor eso que ser como ellos” respondió Koki señalando en otra mesa a dos chicos que abrazaban una sábana envuelta
“Takahisa y Yuya son buenas personas”
“Buenas, si… pero están mal del coco loco”
“Hey! No hablen de ellos como si no estuvieran aquí” dos chicos se sentaron frente a ellos
“Hola Junno. Qué tal, Kazuya?” saludó Yuichi
“Hola bros, qué puede hacer mi body por ustedes?” preguntó Koki mientras movía las manos
“Te han dicho que pareces un rapero cuando mueves así los brazos?” lo miró Junno
“¬¬ pff”
“ Estaban conversando de Takahisa y Yuya, verdad?” preguntó Kazuya
“Solo comentábamos” dijo Yuichi
“No te preocupes, es normal. Para mí son los más raros del hospital~ tienen que admitirlo, ser pareja y además, pensar que esa sábana envuelta es su hijo es demasiado loco” habló Kazuya mientras se metía una zanahoria en la boca
“Quizás esa manta sea un símbolo” le dijo Junno
“Símbolo de qué?! Los has oído hablar? Yuya dice que tiene la cara de Takahisa mientras que el otro dice que tiene los ojos de Yuya… eso, genéticamente es imposible! Más aún cuando ‘su hijo’ no tiene cara”
“Oh, no tendrá cara, pero tiene nombre” se levantó Koki “se llama Joaquín!”
*silencio*
“No es verdad, se llama Tayou” lo jaló Junno
“Que no~”
“Que si~”
“Están discutiendo por el nombre de una sábana? ¬¬” Kazuya los miró
“… no” respondieron a la vez.
“pues yo creo que son muy buenas personas” dijo Yuichi que los miraba
“Nadie dice que no lo sean, es más, siendo tan raros no dejan de ser adorables… pero… no sé, me perturba un poco cuando los veo tan metidos en su rol de ‘padres’” Kazuya se robó otra zanahoria del plato de Koki mientras hablaba “Te invitan a ver al ‘bebé’, te preguntan si es tierno, se emocionan, se ríen y lo peor, es que esperan que uno llegue a su mismo punto de emoción!... Supuestamente, esa cosa es una persona! Quién invita a sus amigos para ver a una persona? Es como si yo te invitara a mi casa para que digas que mi abuelo de 85 años es adorable y luego aplaudamos todos cuando vaya al baño solo… es decir… ustedes entienden lo que quiero decir!”
“Taka~! El bebé está llorando, no está feliz!” justo en ese instante, Yuya alzó la voz
“Uwaaa pero ha dormido mucho, lo hemos alimentado y cambiado el pañal, qué más podemos hacer?!” Takahisa estaba desesperado viendo como su novio mecía al ‘niño’
“Será mejor que lo cargues!”
“No! No puedo!” Takahisa temía ser muy torpe
“Puedes y lo harás!” dijo Yuya dejando a Tayou en sus brazos. Takahisa se quedó helado, nadie entendía nada, nadie había oído ningún llanto desde un principio, pero al parecer éste había cesado “oh, Tayou solo quería que papá lo cargara, míralo, que hermoso es”
“Tiene tus ojos, Yuya” le sonrió Takahisa. Los padres volvieron a sentarse, Yuya apoyó su cabeza en el hombro del otro mientras acurrucaban a su pequeño y adorado hijo.
Los demás muchachos solo contemplaban anonadados; entre los conocidos de Yuichi que observaban se encontraba Shigeaki que decían que enloqueció mientras estudiaba en su casa. Era la época de exámenes y él se dispuso a estudiar día y noche, durmiendo cada vez menos, forzando el lápiz cada vez más fuerte, al punto de llegar incluso a dejar marcas en su escritorio. Un día su madre entró a su habitación para intentar convencerlo de ir a visitar a una prima por su cumpleaños, pero él no quiso, se enfureció y ahuyentó a su madre del cuarto con un bate de béisbol.
Otro chico era el mejor amigo de Shige, Koyama. Él afirmaba que a media noche tomaba la forma de un felino naranja que paseaba por los pasillos y vigilaba a los demás muchachos.
Luego estaba Jin, uno de los chicos más populares del hospital, no sólo por las historias sobre sus aventurillas con las enfermeras y con la propia psicóloga encargada del grupo, sino también por su negligencia y por conseguir botellas de cerveza para sus pequeñas reuniones en la habitación. Yuichi había sido invitado un par de veces a esas fiestas que no le gustaron mucho puesto que sólo eran un montón de chicos riendo tontamente mientras bebían. Al lado de Jin estaba Tomohisa, su mejor amigo, llegó al hospital psiquiátrico por casualidad… o quizás sólo por ser un mentiroso compulsivo, inventaba excusas e historias incluso sin necesidad.
Yuichi seguía viendo alrededor, empezaba a preocuparse por Tatsuya pero no dijo nada. Volvió la vista de frente y al ver los rostros sonrientes de Junno y Kazuya empezó a pensar que muchas personas no merecían estar en ese hospital, era injusto que ellos se encontraran allí, al menos Junno, él… merecía una atención especial, su doble personalidad era un problema que podía resolverse afuera, pero que seguro sus padres estaban hartos de tener que vigilarlo y prefirieron enviarlo a esa pesadilla de hospital antes que mantenerlo en casa. Kazuya por otra parte, se ponía sumamente nervioso cada vez que veía un objeto punsante cerca suyo, perdía el control, se hundía en sonoras carcajadas mientras intentaba preparar ‘la cena favorita de mamá’. Fue por esta razón, en primer lugar que los cubiertos normales de la cafetería fueran cambiados por unos de plástico, la ira que Kazuya había acumulado luego de ver a su padrastro golpeando a su madre fue quizás lo que desató su locura.
“Maldito bastardo” Una voz familiar se escuchó desde donde se encontraba la comida, Ryo sujetando el cuello de la camisa de Tatsuya desafiándolo.
“Crees que puedes hacer lo que quieras solo porque apuñalaste a tu profesor por la espalda?” Tatsuya lo encaraba
“Pelea!” Jin empezó a gritar
“Pelea!” repitieron Tomohisa e Ikuta que se sentaban a su lado.
“No, no! Tatsuya!” Yuichi se puso de pie inmediatamente y corrió hacia ellos. “Por favor Ryo, déjalo”
“Yuichi, no” Tatsuya lo cogió del hombro
“Qué pasa, Tatsuya? Deberías dejar que tu amigo te ayude, seguro es más fuerte que tus ‘maripositas’”
“No pelearé contigo… ya déjame” Tatsuya apartó la mano de Ryo de su ropa
“Entonces, encima de raro eres marica”
Tatsuya no respondió más.
“Lo sabía” Ryo sonrió “Eres un maldito gay”
“Te afecta, Ryo-chan?” Junno se acercó con las manos en los bolsillos… su postura y mirada habían cambiado “Tu actitud empieza a molestarme…”
“Ya basta muchachos” Tomohisa se puso de pie y trató de separarlos, en ese momento, Yuichi tomó ventaja y cogió a Tatsuya de la mano para llevárselo a su habitación.
Una vez estuvieron fuera de todo ese alboroto, Yuichi puso seguro a la puerta y se sentó frente a Tatsuya. Le preguntó qué había ocasionado ese conflicto con Ryo, si se encontraba bien, si necesitaba algo… pero su compañero solo escondió la cabeza entre sus brazos y guardo silencio.
“Tatsuya… “ Yuichi empezó a repetir su nombre varias veces, meciéndolo un poco para que le hiciera caso, pero no respondía. Lo meció más fuerte, quería que al menos lo viera a los ojos y tratar de entender qué pasaba con él, pero Tatsuya sólo lo apartó toscamente para que lo dejara en paz. Yuichi no ceso, siguió llamándolo, pidiendo que levantara el rostro, lo jalaba del hombro hasta que Tatsuya se puso de pie y lo tiró al suelo.
Yuichi se enfadó. Se puso de pie y lo quiso empujar, pero Tatsuya lo cogió de los brazos y no fue hasta que cayeron al piso que cesaron de pelear.
Unas lágrimas empezaron a resbalar por las mejillas de Tatsuya, Yuichi lo sentó en el piso y lo abrazó para que el otro pudiera apoyar la cabeza en su pecho. Sus ligeros brazos rodearon fuertemente la cintura de Yuichi mientras intentaba calmarse.
“Eres demasiado pequeño para estar aquí” susurró Yuichi mientras acariciaba su cabello. No era la primera vez que Tatsuya lloraba en su regazo, y no era la primera vez que Yuichi le decía esas palabras, el menor estaba en el límite de edad para ingresar en ese hospital.
“Entonces… crece rápido y llévame contigo” habló por primera vez, su voz evidentemente cortada por el llanto.
“Lo haría si pudiera” dijo y besó su frente. Tatsuya levantó la cabeza ante este gesto, dejó que Yuichi acariciara su mejilla e instintivamente, el mayor lo besó en los labios. Tatsuya sonrió y volvió a esconder su cabeza en el pecho del otro.
¿Qué hice?...
¡¿Qué hice?!
¡¿QUÉ HICE?! Lo besé? Me aproveché?! Por Dios, qué me pasa?!
Yuichi empezó a torturarse mentalmente, imágenes de cómo ambos se conocieron en ese hospital empezaron a aparecer en su cabeza. Recordó como lloraba Tatsuya durante los primeros días que pasó en ese lugar, lo mucho que le costó hacer que hablara y bromeara, con nadie más lo hacía! Yuichi era el único amigo de Tatsuya… y él… él lo había arruinado! Por un maldito impulso, YUICHI ERES UN IDIOTA! pensó, hasta que de pronto sintió como el otro entrelazaba sus dedos con los suyos.
“T-Tatsuya?”
“Mmm?”
“Lo siento… No sé… Tú…”
“Una mariposa”
“eh?” Yuichi lo separó un poco para mirarlo a la cara “qué cosa?”
“En la ventana… una mariposa” sonrió Tatsuya
Yuichi miró hacia la ventana, no había nada, pero Tatsuya seguía deslumbrado con ese supuesto ser.
“No puedo verla…” confesó Yuichi
“Cuando estoy contigo… siempre las veo”
“eh?... es decir que estas loco por mi?!” Yuichi reflexionó un segundo lo que dijo y se sonrojó “quiero decir…!!!”
“si” sonrió el menor y escondió su cara.
Yuichi estaba confundido, realmente no entendía nada, pero luego de una semana pudiendo disfrutar de los labios y cariños de Tatsuya, empezó a creer que no necesitaba comprenderlo todo… y con el tiempo, las mariposas también empezaron a ser parte de su día a día.
Aunque es extraño, pensó, ya que de alguna manera, todas ellas terminaban revoloteando en su estómago… Bueno, supongo que las mariposas no son como los demás insectos.
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Siento que he fallado un poco, creo q el final se me complicaron las cosas hehe ._. no conozco mucho a kattun, no sé si esto es lo que esperabas Tottsu, pero espero que halla sido entretenido. Tengo que mejorar! prometo tratar de hacerlo y otra vez gomen ne~ por la demora -w-